La nueva Presidenta de la Comisión Europea, la alemana Ursula von der Leyen, ha presentado este martes 10 de Septiembre la nueva estructura y equipo que conformarán la Comisión europea para los próximos 5 años, con el objetivo de trabajar de forma intensa en los cambios relativos al clima, la tecnología y la demografía que transformen la sociedad europea y su modo de vida.
Por lo que se refiere a la cartera de transportes y movilidad, la Presidenta de la CE ha propuesto a la rumana Rovana Plumb como nueva Comisaria de Transportes, actualmente eurodiputada en el Grupo Parlamentario Socialista y anteriormente Ministra de Medio Ambiente y Cambio Climático en su país natal.
Sin embargo, su nombramiento no es automático, sino que los candidatos a Comisarios propuestos por la Presidenta son sometidos a un duro proceso de investigación parlamentaria para analizar su idoneidad, debiendo comparecer ante las comisiones parlamentarias en sus posibles campos de responsabilidad. Luego, cada comité se reúne para elaborar su evaluación de la experiencia y el desempeño del candidato, que se envía al Presidente del Parlamento hasta su definitiva aprobación. De hecho, no es la primera vez que una evaluación negativa del candidato propuesto ha llevado a éstos en el pasado a retirarse del proceso.
De resultar finalmente elegida, la nueva Comisaria de Transportes deberá afrontar inicialmente la compleja aprobación definitiva del Paquete legislativo de Movilidad, que como se recordará fue promovido en Abril de 2017 por su antecesora la Comisaria Violeta Bulc. Como se recordará, este paquete normativo, que incluye proyectos legislativos de vital importancia para el futuro desarrollo de la actividad del transporte por carretera en la Unión Europea, ha estado sometida durante estos últimos años a numerosos obstáculos y enfrentamientos entre los Estados miembros, que han impedido hasta la fecha su aprobación definitiva, aunque el pasado mes de Abril el Pleno del anterior Parlamento Europeo alcanzó un acuerdo en los aspectos más conflictivos del referido Paquete Legislativo.
Así, el acuerdo alcanzado por el Parlamento Europeo incluye una nueva regulación sobre trabajadores desplazados (salario mínimo) en el sector del transporte por carretera. En concreto, la regulación del salario mínimo de los conductores en los desplazamientos a otros países europeos se aplicará tanto en transporte internacional como al transporte interior (cabotaje), por lo que quedarán excluidos exclusivamente los transportes en tránsito por otro país europeo. Pero como novedad, el acuerdo asimismo contempla la exclusión de dicha regulación a los transportes internacionales bilaterales, esto es, a los transportes internacionales en los que el país de origen o destino sea donde el vehículo está matriculado. Esta propuesta es compartida plenamente por FENADISMER, ya que permitirá eliminar las cargas burocráticas que pudieran existir para las empresas transportistas españolas en sus desplazamientos a otros países de la Unión Europea tanto de salida como de retorno, y a la vez ello posibilitará un mayor control de las empresas deslocalizadas principalmente en países del Este de Europa, que operan en la actualidad sin ningún control en el mercado español de transporte.
Otras medidas aprobadas por el anterior Parlamento Europeo en relación al Paquete de Movilidad fueron las relativas al mantenimiento de la actual prohibición de realizar el descanso semanal normal (esto es, el de 45 horas cada 2 semanas) a bordo del vehículo como así dictaminó el Tribunal de Justicia de la UE, así como la modificación de la actual regulación sobre el cabotaje, estableciendo un periodo máximo de cabotaje continuado de 3 días, frente a los 7 actuales, pero sin limitar el número de operaciones en dicho periodo. Asimismo como novedad, tras dicho periodo de 3 días, se establece un nuevo periodo de 60 horas (periodo de enfriamiento) durante el cual no se podrá hacer cabotaje en el mismo país donde se ha realizado previamente.
Asimismo para evitar que algunas empresas de transporte continúen abusando de sus conductores, desplazándoles “de forma permanente” por diferentes países europeos distintos del de su domicilio, el acuerdo estableció la obligatoriedad de que el vehículo retorne periódicamente a su país de residencia, en concreto, en un plazo máximo de 4 semanas. Por último, el acuerdo contemplaba la introducción obligatoria del nuevo tacógrafo digital inteligente en todos los vehículos que realicen transporte internacional como máximo hasta 2024.
En este sentido, se estima que en las próximas semanas se inicien con carácter inmediato las negociaciones interinstitucionales (“Trilogo”) entre la Comisión, el Consejo y el Parlamento europeo, tendentes a su definitiva aprobación y su posterior publicación en el Diario Oficial de la Unión Europea.